La célebre y británica plataforma musical Resident Advisor, junto con con el apoyo y producción de la JNTO – Oficina Nacional de Turismo de Japón, han elaborado una campaña turística magnífica para el país nipón tomando como elemento fundamental la música electrónica japonesa, sus músicos y los espacios que esta ocupa en distintas ciudades del archipiélago.
La relevancia de la música electrónica japonesa
La música electrónica es a menudo sinónimo del mundo nocturno. Y me atrevo a afirmar que Japón, que puede ser considerado padre de la técnica de este tipo de producción musical, es sinónimo de música electrónica. Al terminar la Segunda Guerra Mundial, Japón tuvo que lidiar con el yugo de la ocupación estadounidense y su intervencionismo en la política e industria del país. La economía fue reconducida hacia la producción industrial y tecnológica en un importante porcentaje. Este episodio socialmente traumático de la historia japonesa definiría muchas de las características que a día de hoy son tradicionalmente atribuidas a la sociedad japonesa. Esto es, su convicción por un desarrollo tecnológico que facilite la vida y que esté al servicio de las personas.
Este periodo sería clave para el florecimiento de muchos movimientos artísticos colectivos como Gutai o High Red Center, el surgir de nuevas formas de danza como lo es el butou y por supuesto, la transformación de la música con la adopción de estilos occidentales. Este largo periodo de posguerra sería testigo de los primeros momentos de la música electrónica japonesa. El elemento que marcaría el antes y después en la música japonesa sería el theremin, desarrollado en los años 20 por el ruso Léon Theremin y que es considerado como el primer instrumento de música electrónica de la historia.
El gobierno japonés, bajo la supervisión de Estados Unidos, llevaría a cabo campañas de apoyo a la música invirtiendo en el desarrollo de instrumentos musicales de alta calidad. A día de hoy Japón cuenta con numerosas marcas punteras en la fabricación de instrumentos musicales cuya alta calidad es reconocida en todo el mundo. Un destacado compositor japonés llamado Minao Shibata (1926-96) escribiría diversas publicaciones sobre el futuro de la música y sus instrumentos y como si de una premonición se tratase, Akio Morita, cofundador de Sony poco tiempo después se convertiría en el padre del G-Type, que se constituye como primer dispositivo electrónico moderno de grabación de sonido en cintas. Shibata, haciendo uso del G-Type fundaría el que se considera el primer grupo de músicos que comenzaría a experimentar con la electrónica. Tampoco sería comprensible la existencia del techno ni la electrónica moderna si no hubiera tenido lugar la empresa japonesa Roland con sus secuenciadores TR-303 y TR-909 o Korg y Yamaha con sus sintetizadores y teclados electrónicos. En definitiva, estos elementos son un importante legado para la fundación y posterior desarrollo de la electrónica japonesa y su repercusión permitió la evolución de este género en el resto del mundo.
Hoy, los artistas y músicos de electrónica japoneses, después de la crisis del clubbing en Japón durante los 2000, reciben un cada vez mayor reconocimiento internacional y algunos de ellos se consideran verdaderos embajadores y paradigmas de ciertos subgéneros dentro de este espectro musical. No es momento en esta entrada de nombrar ejemplos concretos, ya que son muchísimos, pero sí de tener en cuenta que el revival del club y del techno en Japón progresa más que adecuadamente y que tiene un futuro asegurado. Otra faceta que hace especial a la música electrónica japonesa es la profunda y paulatina hibridación de esta con otras artes. Japón es un país puntero en lo que se refiere a la combinación de música y arte digital y nadie discute eso cuando atendemos a figuras como Ryoji Ikeda, Itaru Yasuda, Hiroaki Umeda o Daito Manabe, por mencionar tan solo a unos pocos.
Adios fueiho. Hola música
Atrás quedaron los tiempos donde se vendía la polémica de las prohibiciones relacionadas con la Ley de Moral Pública o Fūzoku Eigyō Torishimari Hō, comúnmente abreviada como fueiho. Bailar en Japón no es ilegal como muchos medios sensacionalistas quieren continuar transmitiendo, acentuando casos aislados, simplificando gravemente una situación cuanto menos compleja y magnificando de forma poco realista los contenidos de una ley que atiende más a asuntos relacionados con la explotación sexual, el juego y las apuestas o el narcotráfico. Hoy, desde el gobierno japonés y su Oficina Nacional de Turismo se reivindica la escena clubbing del país y se pone en valor la calidad de la música de sus artistas.
Por otro lado, la escena del clubbing en Japón, que tuvo su mayor exponente en los 80 y 90 y que está viviendo actualmente un verdadero resurgir con la nueva ola del dance y del techno, es sana, y rica, y aunque la fueiho no ha desaparecido completamente la policía tradicionalmente ha hecho la vista gorda en aquellos lugares donde las personas simplemente acuden a disfrutar de la música, beber algo y a mover un poco los pies. Es absurdo pensar que fueiho es una ley relevante para la merma de este tipo de actividades cuando Tokyo y Osaka son verdaderos referentes mundiales de la electrónica. Es cierto que la polémica existió, que movilizó a muchos músicos y que fue origen de un intenso debate pero, en la práctica real, la problemática se presenta cada vez más resuelta y la discusión algo desfasada.
¿Qué es Japan City Guides?
La célebre y británica plataforma musical Resident Advisor, revista esencial para todo aficionado a la electrónica y punto de venta de entradas para sesiones en todo el mundo, con el apoyo y producción de la JNTO u Oficina Nacional de Turismo de Japón, cuya sucursal española se inauguró en 2017, han perpetrado una magnífica campaña turística para el país nipón tomando como elemento fundamental la música electrónica y los espacios que esta ocupa en distintas ciudades del archipiélago.
La propuesta Japan City Guides reúne a cuatro artistas japoneses, todos ellos músicos de electrónica de gran reconocimiento fuera y dentro de Japón. Cada uno de ellos nos guía por locales de moda o de culto dentro del mundo de la música electrónica japonesa y que son también representativos de la escena club de cada una de las ciudades por las que nos hacen de guías. Tokyo, Kyoto, Osaka, Sapporo y Nagoya son las ciudades a las que viajamos como turistas musicales en una serie de cuatro pequeños documentales en YouTube a través de los cuales los músicos protagonistas nos cuentan curiosidades, nos descubren lugares desconocidos y alternativos o nos presentan a los dueños de estos templos de la música electrónica en Japón.
Quizás el más reconocido a nivel internacional de los participantes de Japan City Guides sea AOKI takamasa. Podríamos considerar a Takamasa como el artista y embajador japonés del Intelligent Dance Music o IDM. El IDM es un género de vanguardia y experimentación que presenta un gusto por las melodías quebradas y los acordes disonantes. Nacido en Osaka, Aoki Takamasa busca expresar con su música (y fotografía) la naturaleza del ser humano y el conflicto entre cuerpo e intelecto. Actualmente colabora con la banda de rock alternativo Sakanaction, así como con la firma de moda Anrealage, para quienes realiza el diseño de sonido para sus desfiles en las pasarelas más importantes del mundo. Experimental en el sonido y fascinado por la vanguardia y los retos que depara el futuro, AOKI takamasa, nos guía por su particular y musical Osaka. Takamasa destaca el carácter de las gentes de Osaka como uno de los más peculiares del país «en el buen sentido» según sus palabras. Defiende la creatividad de su tierra y cómo Osaka siempre se muestra abierta e interesada por las vanguardias, no solo en el sentido musical. Su parte del documental es casi como estar una cita íntima con el artista. Nos toma de la mano y nos lleva al peculiar Compufunk, su tienda de discos y sala de conciertos con pizza casera favorita de la ciudad. Incluso lo acompañamos a echar unas carreras en unos karts para después mostrarnos el mítico Circus, uno de los mejores clubes de techno de la ciudad. También visitaremos Kyoto, de la cual Takamasa destaca su rica cultura underground y la presencia de locales destinados a la música electrónica experimental y de culto. Nos descubrirá allí un curioso y desconocido garito llamado Soto, regentado por la banda de música experimental Kukangendai y la subterránea galería de arte Y Gion que durante la noche se transforma en un moderno club de electrónica.
Más Japan City Guides
Lo anterior es solo una muestra. En Japan City Guides también conoceréis Tokyo de la mano de la DJ Akiko Kiyama, Sapporo junto a DJ DYE o la escena de Nagoya junto a Takahide Higuchi, aka Foodman. Desde acchiKei.com os animamos muy fuerte a que veais los documentales. Se trata de un trabajo con un nivel de producción muy fino y altamente disfrutable, con valor cultural y sobre todo de interés turístico para todos aquellos que busquen lugares donde poder vivir y disfrutar la electrónica en Japón.
Podéis hacer clic aquí para visitar el sitio web oficial de Japan City Guides, donde encontraréis el resto de vídeos y listas de reproducción de Spotify creadas por los músicos protagonistas y que buscan ilustrar la atmósfera que les inspira cada ciudad.
Sitio web de la Oficina Nacional de Turismo de Japón